
El partido fue vibrante desde el primer minuto, con alternancia en el marcador y una dura "lucha" en el campo, hasta el minuto 20 de la primera parte, en el que empezamos a distanciarnos en el juego claramente y llegamos al descanso con una ventaja de 1 tanto (12 - 13), pero con una sensación clara de tener el partido bien encarrilado.
La segunda parte empezó igual, con claro dominio nuestro, que nos llevó en el minuto 5 a tener una ventaja de 2 tantos y estar jugando mucho mejor que nuestros contrarios. En ese momento, los árbitros expulsaron a 3 jugadores nuestros en menos de un minuto y nos dejaron con 3 jugadores de campo. Una auténtica vergüenza, 3 expulsiones injustificadas cuando mejor estábamos jugando. Ellos aprovecharon su superioridad numérica y se pusieron 2 tantos arriba.

Los árbitros siguieron sin dar una en todo el partido, incluso no se pusieron de acuerdo en las fueras de banda en varias ocasiones. De risa. Debería haber algún tipo de sanción para estas situaciones.
Nuestros jugadores, con más genio que otra cosa, consiguieron llegar al último minuto con el marcador empatado, pero no pudo ser.
Al final del partido, gestos despectivos e insultos de algún jugador del Lalín hacia los nuestros, quiero pensar que debido a los nervios y la tensión acumulada. Un gran equipo ha de saber perder, pero también ha de saber ganar.
Nuestros jugadores, con más genio que otra cosa, consiguieron llegar al último minuto con el marcador empatado, pero no pudo ser.
Al final del partido, gestos despectivos e insultos de algún jugador del Lalín hacia los nuestros, quiero pensar que debido a los nervios y la tensión acumulada. Un gran equipo ha de saber perder, pero también ha de saber ganar.
En fin, el sector ya es prácticamente inalcanzable, por lo que ahora tenemos que alejar la presión y empezar a divertirnos jugando al balonmano, que eso lo sabemos hacer muy bien.
Debemos felicitar a todos nuestros jugadores y técnicos, que trabajan muy duro preparando cada partido y dan la talla en todo momento, dentro y fuera del campo, aunque los resultados a veces sean injustos.
Debemos felicitar a todos nuestros jugadores y técnicos, que trabajan muy duro preparando cada partido y dan la talla en todo momento, dentro y fuera del campo, aunque los resultados a veces sean injustos.